Qué importante es poner atención.
Atención a una conversación con una persona querida, a tu hijos, a lo que haces, a aprender algo nuevo, a la belleza de la vida, a tu pareja, a todas las personas que tenemos cerca, a los amigos, a los compañeros de vida.
La atención es una definición de Amor. Si quieres a alguien, le prestas atención, tienes una escucha activa sobre lo que te dice.
Si tiene algún problema o algo que celebrar, escuchas, atiendes, te alegras, acompañas en el dolor, en el sufrimiento. En definitiva, estás a su lado acompañando y sobre todo, escuchando.
Hoy en día se habla mucho del déficit de atención. Y se diagnostica como un trastorno, que sigue unas pautas clínicas.
En general, es un tema que se ha incorporado en nuestro tiempo, principalmente en la edad adolescente, y se responsabiliza en muchos casos a las pantallas, móviles, tablet, y a todas las tecnologías que incitan a desviar la atención, que en definitiva, distraen, interrumpen el proceso de aprendizaje.
Todos hemos sido testigos y protagonistas en varias ocasiones de estar en un lugar, en una terraza por ejemplo, y ver a un grupo de amigos, o familia, en la que no se comunican entre ellos. No interactúan, no desayunan ni comen juntos.
Están ahí, si, aparentemente juntos. Sí están presentes físicamente, pero está cada uno a lo suyo, aislado con su teléfono, pantalla,…
Y cuando lo ves -desde fuera- es cuando te das más cuenta.
Siendo el espectador, es cuando uno percibe esta situación.
Eso que hemos escuchado muchas veces: En la era de la comunicación es cuando más desconectados o aislados estamos.
Pero de esto hablaré en otro momento. La tecnología y la era digital tiene también sus cosas buenas, cuando hacemos uso correcto y responsable.
Hoy solo lo pongo como ejemplo por el tema de la Mentoría de hoy, que es la atención.
¿Y qué es la atención?
Su definición nos dice que es el proceso conductual y cognitivo de concentración selectiva de una información.
Algunos expertos coinciden en que es la capacidad de enfocarte bien en algo, de elegir dónde te quieres enfocar y estar presente.
En lo que me enfoco, crece. Eso es la atención real.
Lo que hoy quiero destacar es la importancia de poner la atención en lo positivo, en ti, en lo que eres para poder trascender a los demás.
Cuanto más conectados estamos con nosotros mismos, mejor nos conectamos con los demás.
La que nos ayuda a estar en el aquí y ahora, y poder hacer en cada momento lo que debemos hacer.
A todos nos gusta que nos presten atención cuando queremos compartir algo con los demás. Algo tan sencillo como eso.
Pero la atención hay que entrenarla y tenemos que saber evitar todo lo que puede distraernos de ese foco.
En este sentido es muy interesante la frase del escritor y filósofo
Eugenio d´Ors, que os comparto al final de la Mentoría: “Basta mirar algo con atención para que se vuelva interesante”
